- ya no tengo motivos para despertarme con ganas de ir,
- ya no tengo motivos para arreglarme.
- ya no tengo motivos para cruzarte, sonreírte y sonrojarme.
- ya no tengo motivos para escucharte y sentir una grata satisfacción.
- ya no tengo motivos para beber, ni motivos para querer verte.
- ya no hay motivos para esconderme, pero tampoco para mostrarme.
Hay más divinidad en el arte que en la ciencia; la ciencia descubre, EL ARTE CREA!
miércoles, 10 de septiembre de 2014
un motivo, sólo un motivo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario